Una ceremonia única en Cerro Navia, eso fue la presentación del libro La Vida es Eterna, la biografía de Víctor Jara, con su autor Mario Amorós.
El pasado 30 de marzo en la plaza Ho Chi Min, Mario Amorós presentó La vida es eterna, biografía que cuenta detalles inéditos del artista de la Nueva Canción Chilena, así también aborda la vida social y política de Jara.
Además de ser el puntapié inicial de la programación especial del mes del libro en Cerro Navia, esta presentación se enmarca en el aniversario de los 50 años del Golpe de Estado en Chile.
Amorós es periodista y Doctor en Historia por la Universidad de Barcelona, además ha publicado biografías de Salvador Allende (2013), Miguel Enríquez, además de su investigación Entre la araña y la flecha. La Trama civil contra la Unidad Popular (2020).
El autor español conversó acerca de los puntos más importantes de esta investigación, la relación de Jara con el acontecer social y político del Chile de esa época y también sobre el vínculo histórico del artista con Cerro Navia.
A partir de la investigación que hiciste para este libro, ¿qué detalles nos podrías contar acerca de la relación de Víctor Jara con Cerro Navia?
La relación que tiene Víctor Jara con Cerro Navia tiene que ver con el disco La Población. Víctor no vivió en la comuna ni estuvo en La Herminda, pero él, a propuesta de un compañero suyo de las Juventudes Comunistas, Manuel Sanhueza, conocido por sus compañeros como el Choño Sanhueza, que fue asesinado por la dictadura militar en el año 1974. Víctor vino aquí y, también como contó en varias entrevistas y que yo cito en el libro, entrevistó a todas las mujeres pobladoras que le brindaban agua, conversaban. Grabaron, como sabemos al escuchar el disco, la voz de esas pobladoras tan valientes, y Víctor entregó un trabajo que se convirtió en un emblema dentro de su obra y en la historia de la música popular en Chile.
Además, contó con los textos de su compañero y amigo Alejandro Sieveking, gran dramaturgo, quien armó la idea del disco, el cual es una obra de teatro.
Aquel disco se publicó en septiembre en el año 1972, en un momento importante, lo publicó el sello Dicap de las Juventudes Comunistas, y es un disco que aparece como motivo del séptimo congreso de las juventudes comunistas de Chile, que tuvo como colofón un acto impresionante en el Estadio Nacional, con más de 50 mil personas.
Víctor venía del pueblo más pobre de Chile, en su caso campesinos inquilinos, campesinos sin tierra. Vivió en poblaciones en Estación Central, cuando era un muchacho, con su mamá Doña Amanda y con sus hermanos. Y para él, que pretendía con su música representar al pueblo chileno, estoy seguro que fue una alegría muy grande, porque es una obra muy lograda que inmortalizó el nombre de Herminda La Victoria.
Las canciones de Víctor Jara se escuchan en los cinco continentes, han logrado sobrevivir 50 años y en ese repertorio de canciones el disco La Población y, sobre todo para mí, la canción Herminda La Victoria y Luchín, pues forman parte de las canciones más queridas para todos.
¿Por qué sigue siendo importante recordar a Víctor Jara?
Recordar a Víctor es recordar un tiempo muy importante en la historia de Chile, el horror y la barbarie de la dictadura civil y militar. Es muy importante sobre todo que niñas y niños de esta población conozcan su historia. Pero desde luego que hay episodios de la historia de Chile, como la lucha de los pobladores que merece ser recodada siempre.
Lo que costó que este terreno baldío, hace 56 años, en marzo del año 1967, se haya convertido en que las familias tienen sus casas, calles y parques. Todo eso costó mucho sacrificio de muchas personas. Los niños de la población merecen conocer su historia, y de la mano de Víctor lo pueden hacer, ya que escuchando su obra conocerán también el origen de donde viven.
